viernes, 28 de marzo de 2014

Una discusión estratégica: Ciclos tecnológicos y recursos naturales - por Mónica Bruckmann

 
La innovación tecnológica marca profundamente la dinámica del capitalismo mundial y su forma de organización y de acumulación, y se expresa en la necesidad de que las empresas generen innovaciones como única garantía de sobrevivencia, destruyendo los antiguos sistemas y creando nuevos.  El proceso de “destrucción creadora” al que se refirió Joseph Schumpeter para explicar esta dinámica, es definido como la capacidad de transformación industrial que “revoluciona incesantemente la estructura económica desde dentro, destruyendo incesantemente lo antiguo y creando elementos nuevos”[1]. Este fenómeno representa el impulso fundamental que mantiene en funcionamiento el sistema, generando la necesidad de nuevos bienes de consumo, de nuevos métodos de producción o transporte, de nuevos mercados y de nuevas formas de organización industrial creadas por la empresa capitalista.  La competencia por nuevas mercancías, nuevas técnicas, nuevas fuentes de insumos, nuevos tipos de organización, determina la superioridad decisiva en relación al costo o a la calidad de la producción, e impacta, no únicamente el margen de lucro de las empresas existentes, sino la propia capacidad de existir de las mismas.
 
Esta sucesión de transformaciones tecnológicas afecta el sistema económico en su conjunto y determina los ciclos económicos (véase el estudio de Nicolai Kondratiev sobre las ondas largas) como parte de una serie de innovaciones articuladas que constituyen, cada una de ellas, una revolución industrial.  Sin embargo, estas transformaciones no son permanentes, en un sentido estricto, sino fenómenos discretos separados por períodos de calma relativa, aun cuando se trata de un proceso continuo. Siempre está en desarrollo una revolución industrial o la absorción de los resultados de una revolución, ambos procesos formando parte de un ciclo económico.
 
Esta dinámica tiene dos implicaciones analíticas claves:
 
1. En la medida en que se trata de un proceso cuyos elementos necesitan de un tiempo considerable para manifestarse en sus formas verdaderas y efectos definitivos, no tiene sentido estudiarlo en el corto plazo, sino en un periodo largo de tiempo, es decir, un ciclo o una sucesión de ciclos económicos;
 
2. Al tratarse de un proceso orgánico, el análisis de cualquiera de sus partes aisladamente, puede iluminar ciertos detalles del sistema, pero no proporciona conclusiones más generales.
 
El análisis cíclico de la economía, además de ofrecer instrumentos más rigurosos para comprender la esencia de los procesos económicos, abre paso al análisis prospectivo y a una mayor capacidad de prever y anticipar el comportamiento de los ciclos de innovación tecnológica y de la economía mundial como sistema complejo.
 
 
 
 
 
 

Recursos naturales como eje dinámico de la estrategia de UNASUR - por Alí Rodríguez Araque

 
 
Con la firma del Tratado Constitutivo de la UNASUR, los doce países que la integran dieron un paso de dimensiones históricas. Se trata, nada más y nada menos, que de hacer efectiva la decisión de reunir las partes, hoy separadas, de una gran nación. Porque eso somos: por tener un territorio y un origen histórico comunes, por tener una cultura y creencias que nos son también comunes, por compartir igualmente una lengua que nos permite una comunicación fluida y, no menos importante, porque enfrentamos problemas comunes, principalmente el de la pobreza.
 
No es, sin embargo, el primer intento de integración. Existen, como se sabe, experiencias anteriores, revelación de que, éste, es un objetivo hacia el cual se está aspirando desde hace ya muchas décadas.  El hecho de que tales objetivos no se hayan alcanzado, nos coloca ante algunas interrogantes a la hora de enfrentar la materialización de un proyecto como la UNASUR.
 
¿Dónde radica la principal fortaleza que puede convertir a la UNASUR en un proceso exitoso e irreversible?  En consecuencia ¿cuál es el eje dinámico fundamental en una estrategia de integración y unidad Suramericanas?  ¿Cuáles los principales retos a encarar y superar en el corto, mediano y largo plazo?
 
Un buen método de selección es definir lo que no somos.  Así, es fácil concluir que no somos potencia militar, ni industrial, ni tecnológica y, afortunadamente, tampoco potencia nuclear.  Lo que nos confiere fuerza centrípeta en lo interno y gravitación en el ámbito mundial, es el hecho de representar una impresionante reserva de recursos naturales: minerales, agua, bosques, biodiversidad, tierras aptas para la producción de alimentos, todas las fuentes primarias de energía, una población de 394 millones de habitantes que puebla algo más 17.8 millones de kilómetros cuadrados de superficie, son recursos bastante más que suficientes para dar impulso a los más ambiciosos planes de desarrollo integral que imaginarse pueda.  Y lo más importante, contamos con un pueblo talentoso, amante de su tierra, creativo y laborioso.  Podríamos decir que lo tenemos todo.  Menos algo: una visión común.  Visión es lo que nos ha faltado y, con ella, una estrategia y un plan coherente que nos permita desplegar la gigantesca potencialidad que está contenida en esta riquísima región.
 
Es una dolorosa ironía que sobre esta inmensa riqueza, 130 millones de suramericanos aún sobrevivan en estado de pobreza y, de los mismos, más de 60 millones en situación de pobreza crítica.  Mientras tanto, la tajada del león en muchas de las explotaciones que se realizan, se la llevan las grandes corporaciones mundiales que cuentan con una misma estrategia y un solo mando planetario.  En tanto, la dispersión de nuestros países, la misma que busca superar la UNASUR, aún no es cosa resuelta. Apenas estamos en el comienzo.
 
Una estrategia y un plan que, basado en las coincidencias de nuestras políticas y nuestras leyes, defina objetivos y medios claros para el mejor aprovechamiento de esa inmensidad de recursos, es un requerimiento que clama a gritos nuestra realidad y nuestra experiencia histórica.  Es un hecho comprobado por la vida que, cuando no te ocupas de definir claramente tu política en asuntos tan decisivos como éste, otros lo harán por ti.  Y lo han venido haciendo por ti so pretexto de que tienen el capital y tienen la tecnología.  Esto es relativamente cierto si haces las cosas en la soledad de tus fronteras.  Pero deja de serlo cuando reúnes las ideas para el mejor ejercicio de tus derechos soberanos y permanentes sobre los recursos naturales con tus hermanos más cercanos.  Véase el ejemplo que nos da la Organización de Países Exportadores de Petróleo -OPEP-, una organización intergubernamental agrupada en torno al ejercicio soberano sobre un recurso natural, el petróleo, y que ya ha cumplido sesenta y tres años.  Una organización que agrupa las culturas y sistemas políticos más diversos y que ha logrado mantenerse pese a conflictos, varios de ellos sangrientos, entre algunos de sus miembros.  Y la clave es que los gobiernos han sabido entender que juntos pueden tener la influencia sobre el mercado petrolero mundial que de ninguna manera tendrían separados.
 
En el diseño de la política aquí esquematizada, existe una guía formidable, la Resolución 1803 de la Asamblea General de las Naciones Unidas[1] aprobada en 1962 y que versa sobre el principio de la propiedad soberana y permanente de los Estados sobre sus recursos naturales.  La misma trata no solo sobre el asunto clave de la propiedad (por lo demás ya resuelto en todas nuestras Constituciones) sino también como derecho soberano, que los desarrollos industriales sirvan para beneficio de los pueblos que son, en definitiva, los verdaderos propietarios de esos recursos, recursos que están allí como resultado de procesos naturales ocurridos desde hace millones de años.
 
Ahora bien, no basta con el correcto ejercicio de los derechos de propiedad de los Estados.  Esto es algo imperativo, a lo cual debe añadirse el desarrollo científico y tecnológico dirigido a minimizar el impacto que provoca toda intervención del ser humano sobre la naturaleza.  Y aún es necesario ir más allá.  No basta con diseñar y aplicar políticas racionales para la fase primaria, sino que es necesario trazar y realizar políticas de transformación que expandan las posibilidades de empleo productivo, estable y de calidad como medio eficaz para combatir el desempleo y la pobreza.  A ello se suma la necesidad del desarrollo científico y tecnológico que alivie el peso sobre el trabajo, incremente productividad y reduzca el impacto ambiental.
 
Una política así trazada en sus aspectos más generales demandará una masa de recursos muy significativa.  Y ello, a su vez, va a requerir que se realicen aportes por todos los países miembros para el desarrollo de instituciones como el Banco del Sur, así como de políticas comunes de negociación cuando se requiera el financiamiento extrarregional.
 
Estamos pues, frente a la enorme posibilidad de dejar atrás la pesadilla que representa para tantos seres la pobreza, y dar un vigoroso y creciente impulso al desarrollo integral del ser humano suramericano y, por extensión, dar una contribución al ser humano a secas, no como abstracción, sino como realidad material y espiritual.  Esto, por supuesto, nos coloca ante el problema de la distribución, pero esto es otro tema que ya abordaremos en otra oportunidad.
 
- Alí Rodríguez Araque es secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas -UNASUR-.

* Este texto es parte de la Revista América Latina en Movimiento, No. 493 de marzo de 2014, que trata sobre el tema de "Ciencia, tecnología e innovación en la integración suramericana" - http://alainet.org/publica/493.phtml

[1] http://www2.ohchr.org/spanish/law/recursos.htm
 
Publicado en América Latina en Movimiento, No. 493: http://alainet.org/publica/493.phtml


Tomado de aquí


 

jueves, 27 de marzo de 2014

Se realizó en Costa Rica la I Reunión del Cuarteto de Cancilleres de la CELAC


El Canciller de Costa Rica, Enrique Castillo reiteró hoy el compromiso de la actual Presidencia Pro Témpore de “contribuir al fortalecimiento del diálogo político y la concertación” de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) al dar la bienvenida a sus colegas de Cuba, Ecuador, San Vicente y las Granadinas, que integran el Cuarteto de dicho foro.

La reunión en San José, es muy importante, pues en ella se definirá el calendario de actividades para  el año 2014, así como definir la agenda de trabajo de reunión  de Coordinadores Nacionales de la CELAC que tendrá lugar en Costa Rica, el  9 y 10 de abril próximos, dijo el Ministro Castillo al instalar los trabajos del Cuarteto.

“El diálogo que hoy establecimos es determinante de lo que serán los trabajos a lo largo del año 2014”, expresó el Jefe de la Diplomacia costarricense, quien subrayó que “intercambiamos opiniones y construimos juntos la agenda de la CELAC ”.

Los Ministros del Cuarteto analizaron las próximas reuniones, entre ellas, una el próximo 4 de abril, en Beijing, en la que se definirá los contenidos del Foro República Popular China-CELAC.

También se debe afinar el calendario de un próximo encuentro entre CELAC y la Unión Europea, con Corea del Sur,  así como más de 30 reuniones sectoriales en Costa Rica, según explicó la Vicecanciller y Coordinadora Nacional de CELAC, Gioconda Ubeda.

El Jefe de la Diplomacia costarricense resaltó que la CELAC busca potenciar los esfuerzos conjuntos de las 33 naciones de América Latina y el Caribe para promover el desarrollo sostenible “en busca de intereses compartidos y beneficios mutuos en beneficio de nuestros pueblos”.

El Canciller Bruno Rodríguez, de Cuba, dijo que la primera reunión del Cuarteto, en San José, ha sido “eficiente y armoniosa” y calificó de “momento propicio” la situación actual de la CELAC y sus perspectivas de fortalecimiento tanto a lo interno del foro, como de sus vínculos con socios extraregionales.

También, el Canciller del Ecuador, Ricardo Patiño, calificó de “momento promisorio” de la CELAC por sus próximos encuentros, con la República Popular China, la Unión Europea, entre otros, lo cual, dijo, permite “presentarse de manera conjunta como región”.

En la reunión participaron el anfitrión, Enrique Castillo de Costa Rica, país que ejerce actualmente la Presidencia Pro Témpore de CELAC, los cancilleres Bruno Rodríguez, de Cuba y Ricardo Patiño, del  Ecuador,  así como la Embajadora La Celia A. Prince, representante de San Vicente y las Granadinas.

Costa Rica asumió la Presidencia Pro Témpore (PPT) de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), el pasado 29 de enero, durante la Cumbre del bloque celebrada en La Habana, Cuba.

La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), es un mecanismo de concertación y diálogo político, y durante su ejercicio, Costa Rica se propone liderar el proceso de concertación política y de consenso regional.

La Presidencia Pro Témpore (PPT) permitirá la proyección en el ámbito global y regional como una país democrático, sin ejército, respetuoso del derecho internacional, con liderazgo en derechos humanos, desarme, paz y protección del medio ambiente. También será una oportunidad para promover el turismo.

Costa Rica ha dicho que durante su ejercicio se propone alentar temas como  la agenda de desarrollo post 2015, cambio climático, cooperación Sur-Sur, Desarme nuclear, seguridad alimentaria y agricultura familiar.

La CELAC agrupa a los 33 Estados de la región, y  busca profundizar la integración política, económica, social y cultural de América Latina y el Caribe, basada en el pleno respeto por la democracia y los derechos humanos.

Los países miembros de CELAC: Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, Saint Kitts y Nevis, San Vicente y las Granadinas, Suriname, Trinidad y Tobago, Uruguay, Venezuela.

Juan Manuel Santos reimpulsará la Comisión Nacional de Paz



El presidente de la RepúblicaJuan Manuel Santos, anunció ante los gobernadores del país reunidos en Ibagué la creación de la Comisión Nacional de Paz.

Según el mandatario, el proceso de paz en La HabanaCuba, ha madurado por lo que es necesario contar con una instancia que ayude a consolidar este proceso.

“Estaba esperando que  el proceso madurara lo suficiente para justificar ese paso. Creo que este proceso ha madurado lo suficiente para dar ese paso. Voy a convocar a ese Consejo Nacional de Paz que fue creado hace unos años en la época del presidente (ErnestoSamper. Allí tendrán asiento integrantes de la sociedad civil”.

Santos informó que aceptó la renuncia del consejero para el Diálogo SocialLuis Eduardo Garzón, quien será el encargado de estructurar esta propuesta del Consejo Nacional de Paz, además participará activamente en la campaña reeleccionista.



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martes, 25 de marzo de 2014

Julieta Venegas y Mala Rodriguez - Eres Para Mi

Rata Blanca - La Leyenda del Hada y el Mago

Rata Blanca - Mujer Amante

Por el bulevar de los sueños rotos (Lua Ríos)

Noches de boda (Chavela Vargas)

La canción de las noches perdidas (Pasión Vega)

Que se llama Soledad (Rosario Flores)

Corre, dijo la tortuga (Julieta Venegas)

Si volvieran los dragones (Sabina/Paez)

lunes, 24 de marzo de 2014

Filosofía aquí y ahora "Especiales" - Literatura y política: Jean Paul Sartre

Crean un mapa mundial de conflictos ecológicos


Son miles, afectan a muchos países y están fundamentalmente generados por la creciente demanda de energía y recursos naturales.

De los casos que detalla el recién creado Atlas global de Justicia Ambiental, más de 300 son de América Latina.

Y además, los más perjudicados por estos conflictos que tienen que ver con el medio ambiente son los más desfavorecidos.

Esas son algunas de las conclusiones de esta plataforma interactiva, producto del trabajo de un equipo internacional de expertos coordinados por investigadores del Instituto de Ciencia y Tecnología Ambiental de la Universidad Autónoma de Barcelona.

“El Atlas muestra cómo los conflictos ecológicos están aumentando en todo el mundo, por demandas de materiales y energía de la población mundial de clase media y alta”, comentó Joan Martínez Alier, director del proyecto europeo de organizaciones de justicia ambiental EJOLT (Environmental Justice Organizations, Liabilities and Trade) que hizo posible este mapa. [Nota del bloguero: ¿es igual el consumo de la clase media argentina que de la clase media norteamericana? ¿igual el de la clase alta rusa que la clase alta hondureña? Creemos que no. Habría que conocer las diferencias]

“Las comunidades que reciben el mayor impacto de los conflictos ecológicos son pobres, a menudo indígenas, y no tienen poder político para acceder a la justicia ambiental y a los sistemas de salud”, señaló Alier.

Injusticias medioambientales

Creado con la colaboración de activistas y académicos, el inventario de casos medioambientales permite a los usuarios buscar y visualizar los conflictos por tipo de material (ya sea minerales, hidrocarburos, agua o desechos nucleares), compañías involucradas y países.

En América Latina, el mayor número de casos documentados por el atlas se distribuyen entre Colombia (72), Brasil (58), Ecuador (48), Argentina (32), Perú (31) y Chile (30).

El interesado puede, entonces, seleccionar uno de los puntos ubicados en el mapa y obtener información sobre, por ejemplo, el juicio que enfrentó la compañía productora de soja Monsanto en Argentina por el uso indebido de agroquímicos.

O sobre el caso de la marca Chiquita, distribuidora de plátanos, en Colombia.

El mapa detalla que grupos defensores de derechos humanos, medioambientales y laborales han denunciado a esta empresa por los problemas ambientales, sociales y de salud causados por la violación de derechos básicos de sus trabajadores y la financiación ilegal de grupos paramilitares.

Estos son sólo dos casos de los cientos de puntos que cubren la región: clasificados según su color, hay conflictos que tienen que ver con el agua, la minería, la deforestación o los residuos tóxicos.

Esperanza

La iniciativa, que contó con la participación de 23 universidades y organizaciones de justicia ambiental de 18 países, tiene varios objetivos, entre los que se encuentra el de hacer accesible la información y dar más visibilidad a estas disputas.

Sus creadores esperan que nuevas organizaciones civiles y expertos en áreas específicas contribuyan para ir cubriendo de puntos los espacios y regiones que aún están vacíos.

De momento, y aunque los miles de conflictos relevados no invitan al optimismo, sus responsables destacan las señales positivas.

“El mapa muestra tendencias preocupantes como la impunidad de las compañías que cometen delitos medioambientales o la persecución de los defensores ambientales, pero también inspira esperanza”, dice Leah Temper, coordinadora del Atlas.

“Entre las muchas historias de destrucción ambiental y de represión política también se hallan casos de victorias en la justicia ambiental”.

De hecho, precisa Temper, este es el caso del 17% de los conflictos analizados: se han ganado juicios legales, se ha logrado la cancelación de proyectos y se han conseguido la devolución de bienes a algunas comunidades.

El Atlas fue presentado este miércoles en Bruselas, en la Delegación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.





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Legisladores y organizaciones presentan proyecto para derogar la ley APP


Legisladores opositores y miembros de organizaciones sociales presentaron en el Senado un proyecto de derogación de la Ley de Alianza Público-Privada (APP) por considerar que viola artículos de la Constitución, como la división de poderes y la obligación de que las concesiones sean aprobadas por el Congreso.

Los senadores del Frente Guasu –Fernando Lugo, Esperanza Martínez, Carlos Filizzola, Hugo Richer y Sixto Pereira–  junto con los integrantes de la bancada del Partido Demócrata Progresista, Desirée Masi y Pedro Santa Cruz, presentaron este jueves ante la Vicepresidencia del Senado  el Proyecto de Ley “Que deroga la Ley N° 5.102/2013 de promoción de la inversión en infraestructura pública y ampliación y mejoramiento de los bienes y servicios a cargo del Estado”, más conocida como ley de Alianza Público-Privada (APP). La presentación estuvo acompañada de integrantes de organizaciones sociales y campesinas como Luis Aguayo y Marcial Gómez.

El texto fue recepcionado por el senador Ramón Gómez Verlangieri, vicepresidente primero de la Cámara de Senadores, quien prometió celeridad en la resolución de la propuesta.

En nombre de los autores del proyecto, el senador Carlos Filizzola explicó los alcances del proyecto presentado.

“Nosotros no estamos de acuerdo con este proyecto de Alianza Público-Privada (APP) que fue aprobado en el Parlamento y promulgado por el Presidente Cartes porque  lo que hace es vender, entregar nuestro patrimonio público en una concesión que se quiere encubrir. Porque acá lo que se quiere es privatizar el patrimonio del Estado paraguayo  durante 40 años”, dijo el legislador citado por la página de la Cámara de Senadores.

Añadió que las concesiones pueden incluir bienes fundamentales como agua y energía eléctrica, además de otorgar poderes discrecionales al presidente de la República, que puede entregar dichos recursos fundamentales sin la participación de los otros poderes del Estado.

“Esta ley también es inconstitucional porque atenta contra varios artículos constitucionales al quitarle atribuciones al Parlamente que le otorga la propia Constitución Nacional”, refirió el parlamentario. La Carta Magna establece que las concesiones deben contar con el acuerdo del Poder Legislativo.

Inconstitucional

Por su parte, la senadora Desirée Masi se refirió a los dos aspectos principales de la ley que generan especial preocupación.

En primer término aludió a la cuestión constitucional, pues esta ley viola el artículo 3 de la máxima ley de la nación, que señala que ningún poder podrá delegar o atribuirse facultades extraordinarias o la suma del poder público.

“Con esta ley redactada de esta manera, el poder Ejecutivo se atribuye poderes que son exclusivos del Legislativo e incluso del Poder Judicial. Aquellas personas, aquellos sectores sobre todo empresariales que al parecer apoyan esta ley, sin leer el texto de la Constitución, ya ven lo que está pasando en este momento, las primeras licitaciones son adjudicadas a empresas extranjeras  y esta va a ser la modalidad del APP”, expresó la legisladora citada por la web de la Cámara Alta.

La parlamentaria enfatizó que la ley de APP también viola el artículo 202 en su numeral 11, que establece que el Poder Legislativo es el que tiene que aprobar o rechazar las concesiones.

“Nosotros como sectores políticos, tenemos la casi certeza de la tendencia que tiene el presidente Cartes de concentrar el poder. Eso es sumamente grave en un sistema republicano que se base sobre todo en ser contralores y contrapesos entre poderes”, finalizó.

La derogación de la Ley de APP es una de las principales reivindicaciones de la huelga general del 26 de marzo, que además incluye el reclamo de un reajuste salarial del 25%, control de precios de la canasta familiar, por un modelo de desarrollo nacional, por el rechazo a la suba del pasaje, por la libertad sindical, contra la criminalización de la lucha social, por la libertad de los campesinos presos por la masacre de Curuguaty y la recuperación de las tierras de Marina Cue.




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jueves, 20 de marzo de 2014

Por un mundo multipolar - Emir Sader

 
Entre las enormes trasformaciones que el mundo ha sufrido en las últimas décadas, una que tuvo la mayor consecuencia ha sido el paso del mundo bipolar al mundo unipolar, bajo la hegemonía imperial norteamericana. El fin de la guerra fría trajo no solo la derrota, sino también la desaparición del campo socialista, abriendo paso a la hegemonía de la única superpotencia: los Estados Unidos de América (EUA).
 
El que fue anunciado como el tiempo de la Pax Americana se ha mostrado como un tiempo de guerras, en el que EUA se vale de la inexistencia de otro campo que le impusiera límites, para buscar resolver todos los conflictos con su militarización, con el uso de su superioridad en el plano de la violencia. Fue así en Afganistán, en Irak, en Libia.
 
La lucha por un mundo de paz, de resolución pacífica de los conflictos es, así, una lucha por la quiebra de la hegemonía imperial norteamericana. Es la lucha por un mundo multipolar.
 
Cuando América del Sur crea un Consejo Suramericano de Defensa está contribuyendo a la resolución pacífica de los conflictos, como lo ha hecho en el caso de la relación de Colombia con Ecuador y Venezuela, así como en el intento separatista en Bolivia. 
 
El rol de las fuerzas políticas en el mundo actual se define por la posición que tienen respeto a la hegemonía imperial norteamericana. Los gobiernos de Europa, por ejemplo, son parte integrante del bloque de fuerzas comandado por EUA, se comportan como sus aliados fieles, rol similar al de Japón, Israel, entre otros.
 
En este marco, toda fuerza que, por alineamiento político e ideológico o simplemente en la defensa de sus intereses nacionales, se enfrente a la hegemonía estadunidense, desempeña un rol positivo, favorable al surgimiento de un mundo multipolar.
 
Son los casos de gobiernos como los de Rusia, China, Irán, Siria, entre otros. Amenazados por la política agresiva de EUA, que busca imponerles sus intereses por medio de formas violentas, resisten, constituyen alianzas para ello, buscan debilitar la capacidad de acción de EUA. Independientemente de las razones que los mueven e incluso de la naturaleza de sus regímenes políticos, en el ámbito internacional son aliados de aquellos que luchan en contra de la dominación imperial norteamericana y por la construcción de un mundo multipolar.
 
Hasta hace poco los EUA habían logrado las condiciones políticas, internas e internacionales, para trasferir los conflictos al plano militar y resolverlos a su favor. A partir del conflicto con Siria, la situación ha empezado a cambiar. El gobierno Obama no logró siquiera el apoyo de Gran Bretaña, tampoco el apoyo de los militares norteamericanos y de la opinión pública interna. Tuvo que aceptar los términos de la negociación política del conflicto, al que se agregaron las negociaciones con el nuevo gobierno de Irán. Han tenido que abandonar las amenazas de bombardear de Siria, al tiempo que han aflojado las medidas de bloqueo a Irán.
 
Actitudes que, de forma automática, han aislado a Israel y Arabia Saudita, antes estrechos e incondicionales aliados de EUA.
 
Se ha abierto una nueva coyuntura internacional, donde Rusia surge como un actor importante. La crisis de Ucrania y la anexión de Crimea a Rusia, ya son parte de ese nuevo escenario, en el que se debilita la capacidad norteamericana de imposición militar de sus intereses. EUA sigue siendo la única superpotencia a escala mundial, pero ya no encuentra las facilidades que tenía, desde que surgió como potencia vencedora de la guerra fría, para imponerse en el mundo.
 
- Emir Sader, sociólogo y cientista político brasileño, es coordinador del Laboratorio de Políticas Públicas da Universidade Estadual do Rio de Janeiro (Uerj).
 

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miércoles, 19 de marzo de 2014

Argentina busca "normalizar" su inserción mundial - por Julio C. Gambina

 
Creo que estas son preguntas necesarias y fundamentales para el momento actual de nuestras economía-política: "¿Por qué quedar prisionero de la inversión externa y reproducir el modelo productivo extractivo para la exportación o el desarrollo fabril de armaduría dependiente de insumos externos, también para la inserción exportadora? ¿Puede construirse otro modelo productivo en el agro y en la industria? ¿Es posible modificar el patrón de consumo estimulado por la producción monopolista actual?" 
 
 
Luego de idas y vueltas se confirmó que el Club de París habilita la discusión para cancelar deuda pública impaga por unos 9.000 millones de dólares desde fines de mayo próximo. 
 
Vale recordar que la puntada inicial fue dada a comienzos de año, por el Ministro de Economía que acercó en enero una propuesta de pago en viaje relámpago a París. 
 
El paquete de “negociación” incluye que el FMI revise las cuentas de la Argentina. 
 
Todo indica que se está en caminos de “normalización” de la inserción internacional de la Argentina con el sistema mundial del capitalismo. El Club de París incluye a las principales potencias del capitalismo y a los organismos internacionales. 
 
Lo curioso del caso es que se trata de una deuda mayoritariamente asumida en tiempos de la dictadura genocida y que por lo tanto, bien podría catalogarse de “odiosa”. 
 
Muchos cuestionan la posibilidad de auditar la deuda por las sucesivas renovaciones realizadas en tiempos constitucionales, de hecho, cada turno presidencial desde 1983 renegoció y convalidó deudas. Ocurrió con Alfonsín, Menem, De la Rúa, Kirchner y con Fernández. 
 
Si bien el argumento de la imposibilidad de auditar toda la deuda es discutible, no hay duda que esta parte de las acreencias es pasible de ser denunciada, claro que si se la investiga con procesos de auditorías contables, incluso de carácter internacional siguiendo el ejemplo del antecedente ecuatoriano.
 
El Club, Repsol y el CIADI...
 
No existen dudas que el gobierno argentino busca re-establecer lazos de inserción con el mundo capitalista, lo que supone terminar el proceso de cesación de pagos iniciado en diciembre del 2001, para lo que resta culminar el arreglo con el Club de París y con el 7% de los tenedores de títulos que no ingresaron a los canjes de deuda del 2005 y sus reaperturas del 2010 y 2013, algunos de los cuales se procesan en conflictivos juicios en EEUU. Entre ambos conceptos puede alcanzarse un valor de 15.000 millones de dólares.
 
Pero también, Argentina empezó a reconocer los fallos del CIADI sumando nuevas deudas a soportar por las finanzas públicas. Insistimos en que Argentina es el país con mayores demandas ante este ámbito del Banco Mundial, del cual ya se retiraron Bolivia, Ecuador y Venezuela y que Brasil jamás suscribió. Los procesos en curso ante el CIADI constituyen una hipoteca difícil de estimar para las finanzas públicas argentinas.
 
En ese camino de “normalización” es que se justifica el acuerdo propuesto a Repsol, que esta semana defendió el gobierno ante el Senado, para cancelar la deuda por la expropiación parcial de YPF. El pago será en bonos con valor nominal por 6.000 millones de dólares, con vencimientos sucesivos hasta el año 2033 y que pueden valorizarse y costar al fisco en todo el periodo de circulación unos 11.000 millones de dólares.
 
Es evidente que esta danza de millones de dólares por deudas viejas o nuevas, odiosas o reales, que bien vendría investigar y auditar, incluso favoreciendo los procesos legales en curso en la justicia de nuestro país, tienen como sentido “normalizar” la inserción de Argentina en el capitalismo mundial.
 
¿Para qué? La explicación alude a las restricciones externas, o sea, al ingreso de capitales foráneos para el funcionamiento del orden capitalista local, o si se quiere al saldo positivo del ingreso y salida de capitales. 
 
En el 2013 se aceleró la pérdida de divisas, la llamada fuga de capitales, ejemplificada en la caída de más de 12.000 millones de dólares de reservas internacionales. La fuga no significa necesariamente una situación delictiva, sino opciones de búsqueda de rentabilidad de las inversiones de capital en el exterior. Es lo que argumentó Repsol para explicar la remisión de utilidades al exterior por 13.000 millones de dólares en una década. Fueron fondos relocalizados para inversiones en diversos territorios, especialmente en África.
 
La fuga de capitales viene de larga data, aceleradas desde el 2011 y que intentó frenarse con la devaluación de enero pasado, algo que cuesta asumir como política deliberada en ámbitos gubernamentales. Un interrogante de la coyuntura remite a si se frenó el drenaje de divisas, si se puede revertir la situación y por lo tanto si se puede considerar estable la paridad cambiaria o requerirá nuevas adecuaciones en el corto o mediano plazo de este mismo año.
 
Se argumenta que el país necesita ampliar sus inversiones para mejorar la productividad y con ella el ciclo virtuoso de la producción, es decir el consumo y la inversión. Pura lógica de funcionamiento del orden capitalista, que requiere de inversores con disposición a valorizar sus capitales, o sea a producir plusvalor y obtener ganancias como resultados.
 
El problema son los límites a la inversión, situación clara respecto de la inversión pública, que sostuvo en estos años la tasa general de inversión y hace evidente la escasa disposición a invertir del capital local, algo que se explicita en los discursos oficiales que sugieren con recurrencia a los empresarios que inviertan en la ampliación de la producción local, con escasísimo resultado.
 
Por todo ello es que la intencionalidad gubernamental pasa por atraer inversores del exterior, en el camino que sugiere la asociación entre YPF y Chevron. Pero también habilitar el camino de obtención de nueva deuda, lo cual requiere terminar con la cesación de pagos como exigencia del sistema financiero mundial.
 
¿Es posible transitar otro camino, otra política económica?
 
No se trata de una pregunta retórica. La respuesta dividió aguas políticas en el movimiento popular que resistió las políticas menemistas (1991/1999) y las de la Alianza (1999/2001), y antes la de la dictadura (1976/1983). 
 
Una porción del movimiento popular y del pensamiento crítico de los 70´ y los 90´ considera que las políticas de la última década (2003/2013) son el límite de lo posible y acreditan como éxito la disminución de los indicadores sociales tales como se manifestaban en la crisis del 2001. Algunos de ellos se animan a suscitar la necesidad de relanzar un imaginario de nueva ronda de reformas que pueda entusiasmar y contribuir a constituir sujetos políticos y sociales que sostengan un proyecto político para la transformación. 
 
El límite que se les presenta a unos y a otros es el propio orden capitalista, bajo políticas ortodoxas o de austeridad, (como en Europa u otros países que en nuestra región sustentan políticas de libre comercio); o neo-desarrollistas, (sea EEUU y su intervencionismo estatal, tanto como países con políticas críticas al neoliberalismo en América Latina). La heterodoxia argentina choca también con el capitalismo real, que exige condiciones para sostener un ciclo de inversiones que asegure rentabilidad adecuada al tiempo histórico de crisis capitalista. Es la alta rentabilidad ofrecida lo que hizo emergentes a China, India o Brasil, ante las bajas rentabilidades ofrecidas en el capitalismo desarrollado, con tasas de interés tendiendo a cero. Se puede escamotear el índice de precios ante cierto punto, tal como ocurrió entre 2007 y 2013, pero no se puede hacer eternamente. 
 
La lógica del mercado capitalista solo acepta un determinado nivel de intervención estatal, especialmente si existe organización y lucha social desplegada en las calles. Por eso, las desmovilizaciones masivas de la sociedad son funcionales a la demanda de “normalización” capitalista, y al mismo tiempo, convoca a sostener la capacidad de movilización, de resistencia y de demanda por mejoras sociales de los sectores más perjudicados en el orden económico.
 
Podríamos recordar a Hugo Chávez cuando señaló a fines del 2004 que no debían esperarse soluciones para los pueblos del mundo bajo la lógica del orden capitalista, que recordemos, se somete a la lógica de la ganancia y la acumulación. De ahí surge la convocatoria a pensar nuevamente el socialismo en el Siglo XXI. Se legitima así el pensamiento crítico anti capitalista y se habilita a discutir un nuevo orden de relaciones sociales en la economía, retomando la agenda sustentada en el Manifiesto Comunista para el Siglo XIX y más fundada en El Capital.
 
Es cierto que ante este debate, muchos acusan a la propuesta de utópica, ante los límites concretos para afirmar y desarrollar el anticapitalismo como propuesta a construir en la sociedad actual, sea en Venezuela o en cualquier país. Conspiran las experiencias fallidas (URSS y Europa del Este) y aquellas en curso, entre ellas la cubana, que tiene el límite del criminal bloqueo estadounidense y una situación de época mediada por la ofensiva capitalista desplegada desde la crisis de mediados de los 70´. La articulación integrada de un bloque socialista está limitado desde la desaparición de la URSS y el bloque soviético, e incluso las articulaciones con pretensión alternativa, el “tercer mundo”, atraviesa por los límites de sus diferentes posiciones en la situación actual, donde el imaginario cambio si se es “emergente” o receptor de inversiones externas, o si se está en situación de extrema vulnerabilidad, como ocurre en la periferia del sur del mundo.
 
Este es el marco de la discusión en nuestro país, en la región y en el mundo, que puede condenarnos al límite de lo posible o abordar el camino de la crítica de la realidad, por muy dura que esta sea, es decir, la crítica del capitalismo, lo que exige ir más allá y proponer un rumbo alternativo. Es el camino de Cuba y el que esbozan propuestas que aun requieren de mayores contenidos y sobre todo de una densidad social consciente suficiente para disputar sentido común en el movimiento popular y en la sociedad.
 
¿Por qué quedar prisionero de la inversión externa y reproducir el modelo productivo extractivo para la exportación o el desarrollo fabril de armaduría dependiente de insumos externos, también para la inserción exportadora? ¿Puede construirse otro modelo productivo en el agro y en la industria? ¿Es posible modificar el patrón de consumo estimulado por la producción monopolista actual? 
 
Se puede contestar a esos interrogantes por la afirmativa, pero requiere de un profundo debate sobre el diagnóstico de situación de la coyuntura para pensar más allá del capitalismo, límite de lo posible para una parte del activismo social y político. Un activismo contenido en un imaginario de reformas que la transnacionalización apenas permite bajo ciertas circunstancias históricas, aquellas que generó a sociedad argentina movilizada a fines del ciclo regresivo de los 90´.
 
Cuando me interrogan sobre las medidas concretas acudo a la extensa programática difundida por el movimiento obrero, campesino, de mujeres, en defensa del medio ambiente o la relación metabólica adecuada entre los seres humanos y la naturaleza, o la armonía entre la producción humana con la naturaleza, e incluso sectores de pequeños y medianos productores y empresarios, de cooperativas y el movimiento de autogestión; a los que sumo la demanda por la des-mercantilización de la educación, la salud, la vivienda, la transporte, la energía. Son todas propuestas a asumir socialmente para disputar políticamente el orden capitalista y construir el otro orden posible, el socialismo.
 
Claro que no es sencillo, pero es lo que muchos nos proponemos ante una realidad que bajo la lógica de lo posible termina promoviendo la concentración y centralización del capital para la valorización y la explotación de la fuerza de trabajo y la naturaleza.
 

Buenos Aires, 15 de marzo de 2014
 
 
Tomado de aquí
 
 
 
 

martes, 11 de marzo de 2014

Homo Muerte


Por Rodrigo Fresán
 
Desde Barcelona
  UNO Sopla un viento de muerte y cada vez hay más o menos muertos. O algo por el estilo. Pero no tan así. A ver si Rodríguez se aclara un poco mientras sube de volumen calórico su calefacción sin que eso le impida seguir temblando, al imaginar el congelante recibo del gas que le llegará con la primavera. Hay menos muertos, pero hay cada vez más viejos. Es decir: si los cincuenta años son los nuevos cuarenta, entonces los viejos son los nuevos muertos. Porque son viejos que viven más de lo que deberían. Porque son viejos que pasan los primeros tramos de su vida de ultratumba no en el Más Allá sino en el Aquí Mismo. Y con tanto viejo pretérito no hay novedad futura que aguante. Y lo que menos aguanta es la sanidad pública: “Más cáncer pero menos muertes” es un titular de diario reciente. Y lo que allí se informa es que desde el 2008, año del comienzo de una crisis que todavía no se mencionaba pero ya hablaba sola, las defunciones por esa enfermedad cayeron un 1,3 por ciento en España (país donde una de cada seis personas tiene más de 65 años) mientras que los diagnósticos aumentaron en un 9,6 por ciento en hospitales donde más de la mitad del gasto en medicamentos se reparte entre oncología, HIV y enfermedades reumáticas. Hospitales desde los que se denuncia que la Administración pone cada vez más obstáculos a la hora de implementar terapias de última generación. Así, las salas de espera rebosantes de viejos que ya saben lo que les espera pronto, pero los desespera ahora. Lo de antes, lo del principio: son muertos pero están viejos o son viejos pero están muertos. Y eso es todo, amigos.

DOS Claro que están también los que no se resignan a semejante destino y –otro titular– “Los suicidios suben un 11 por ciento en 2012, hasta los 3539, la mayor tasa desde 2005”. Así, en España, ponerse punto y final a uno mismo es ya la principal causa de muerte no natural, por encima de los accidentes de tránsito. Accidentes que incluyen a esos suicidas que deciden acabar con todo saliendo a toda velocidad y en sentido contrario por una autopista para estrellarse y estrellar a alguna familia. Una familia que sólo quería pasar un buen fin de semana y no pensar en cosas como que el tiempo pasa y que pronto serán viejos sin siquiera sospechar que, por culpa de un maldito desesperado, de pronto son muertos sin haber sido viejos. Leyendo sobre suicidas, Rodríguez se entera de que, en España, el darse muerte es una práctica mucho más extendida entre los hombres que entre las mujeres. Y que la cifra es especialmente pronunciada en la franja de edad que va de los 25 a los 34 años. ¿Por qué será? Rodríguez ni se atreve a pensar en ello, pero se dice en voz bajísima que no debe ser sencillo descubrirte a los 34 viviendo con tus padres que ahora viven con sus padres. Y todos juntos allí, esperando que pase el temblor, hasta que un día te despiertas convencido de que después del temblor sólo habrá tiempo para el rigor mortis y entonces por qué no dejar un cadáver bien parecido antes que un cuerpo demasiado usado y cuyos órganos ya desafinados ni siquiera sirven para cantar en otros cuerpos que sólo quieren vivir y llegar a viejos.

TRES Más datos: los fallecimientos suben por segundo año consecutivo en España, superando por primera vez las 400.000 muertes al año. ¿Por qué? Por el creciente envejecimiento de la población, porque el nivel de la atención médica se ha empobrecido casi tanto como el de los pacientes, porque a morir que son dos días. Se ha reducido la tasa de mortalidad infantil, pero ha subido la de mortalidad femenina. Y –cada vez menos tibio y cadavérico consuelo– peor están en Grecia, donde los infartos aumentaron un 30 por ciento en dos años. En resumen: hay más muertos también en Islandia y en Portugal y en Irlanda. ¿Por qué será? ¿Tendrá algo que ver todo esto con el incremento de las consultas en centros de salud mental por casos de ansiedad y depresión y consumo de psicofármacos de diversos colores? ¿Nervocalm para todos para festejar el medio siglo de una eterna Mafalda por siempre joven pero no-muerta y no-dibujada desde hace tanto?

Alegría, otro titular: mientras ya no se buscan los huesos de Federico García Lorca y se siguen buscando los restos de la asesinada Marta Del Castillo –y aletean en el aire los espectros de los muertos en los trenes de Atocha hace diez años– ahora “Madrid buscará los restos de Cervantes utilizando un georradar en el Convento de las Trinitarias” donde, se cree, “fue enterrado de forma humilde”.

Hace unas noches, volviendo del trabajo, Rodríguez se detuvo a tener un escalofrío junto a un mendigo que llevaba un cartel colgado al cuello donde se leía: “Aunque respire y me mueva no se engañen: estoy muerto. Por favor, dadme lo que podáis para que yo descanse en paz”.
Rodríguez le dejó unos euros. No es la paz, pero es uno de esos menúes económicos con pizza y bebida y selfie.

CUATRO Y ésta ha sido una semana en la que ha vuelto a comprobarse cómo las cada vez menos y más enfermizas páginas de cultura en los periódicos –ahora al borde de una nueva vieja guerra en este continente para muchos ya muerto– se fortalecen y se multiplican cuando se trata de glosar y celebrar a muertos cultos. Una ráfaga que no cesa y sigue y Paco de Lucía y Ana María Moix y Alain Resnais y Leopoldo María Panero y Gérard Mortier y –supone Rodríguez– en el mundillo ilustrado todos deben estar mirándose muy nerviosos y haciendo apuestas secretas acerca de quién no llegará al próximo y cada vez más agónico e histérico Sant Jordi, ese espejismo-oasis donde se venderán todos los libros que no se vendieron en el resto del año y hasta el año que viene, si viene, si vamos, si seguimos.

CINCO Mientras tanto y hasta entonces, Rodríguez decidió ver Nebraska. Y salió muy deprimido. Otra de esas películas pertenecientes al género geriátrico, donde un actor olvidado o subestimado se consagra o resucita al final de su carrera haciendo de viejo sin necesidad de maquillaje o prótesis. En Nebraska –una versión anciana de The Last Picture Show– el viejo Bruce Dern hace muy bien de viejo porque está viejo. Pero de viejo-viejo. Y, sí, como todas las películas de Payne, Nebraska tiene momentos tristemente graciosos y agridulces. Como esa visita al cementerio, en la que un hijo ya no tan joven comprende que falta menos para que no pase nada. Y que estar vivo es la muerte.

SEIS De regreso en casa, en un documental científico, Rodríguez se entera de que existe una enfermedad extraña llamada Delirio de Cotard, condición patentada por un neurólogo francés a finales del siglo XIX. A saber: el franco desorden psicológico de un vivo que un mal día se despierta convencido de que es un muerto.

Arrastrando los pies, casi en trance valdemaresco, con náuseas de Messi pero con bastante menos fortuna, como si caminara por las carreteras de Nebraska, Rodríguez se va a la cama y reza porque mañana los diarios no anuncien que esa rareza francesa es ahora el lugar común de una epidemia española.

Mejor, piensa, miserable y cobarde, otro singular muerto culto, ¿sí? Como ese que declaró que “nunca se leyó y se escribió tanta mierda como ahora”.

Y Rodríguez se duerme contando escritores y músicos y plásticos y actores todos en edad de merecer aunque no se lo merezcan.

Sálvese –sobreviva– quien pueda.



Tomado de aquí


 

"Let me go" - Avril Lavigne ft. Chad Kroeger

lunes, 10 de marzo de 2014

Sólo el 11,3% de los venezolanos está a favor de que continúen las protestas



Un sondeo de opinión arrojó que 80,9% de los venezolanos catalogó la primera Conferencia de Paz, que se instaló el 26 de febrero en el Palacio de Miraflores, con la presencia de varios sectores del país, como excelente, buena o algo buena.

De acuerdo a un estudio de la encuestadora International Consulting Services (ICS), realizado entre el 27 y 28 de febrero a 800 personas en varios estados del país, apenas 14,8% considera algo mala, mala o pésima la instalación de esta Conferencia, que fue convocada por el Ejecutivo.
La información la dio a conocer el periodista José Vicente Rangel, en su programa dominical José Vicente Hoy, que transmite Televen.

Ante la interrogante "¿Considera usted que el primer acuerdo nacional debe ser el respeto irrestricto a la Constitución?", 91,3% considera estar muy de acuerdo, de acuerdo o algo de acuerdo; mientras que 7,7% está algo en desacuerdo, en desacuerdo o muy en descuerdo.

En cuanto a la pregunta: "¿Está usted de acuerdo o en desacuerdo en que se abra una comisión de la verdad para revisar la situación económica del país?", 97,2% se manifestó de acuerdo o algo de acuerdo; frente a 2,7% que dijo estar algo en desacuerdo o en desacuerdo.

Sobre la inasistencia del gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, a la Conferencia de Paz, 26,4% de los encuestados la consideró excelente, buena o algo buena; mientras que a 71,7% le pareció algo mala, mala o pésima.

Entretanto, sobre la asistencia de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) a la Conferencia de Paz, 92,1% lo consideró excelente, buena o algo buena; y a 3,8% le pareció algo mala, mala o pésima.

Ante la interrogante: "¿Está usted de acuerdo o en desacuerdo que los actores y líderes de la oposición asistan a la Conferencia de Paz?", 91,3% respondió muy de acuerdo, de acuerdo o algo de acuerdo y 5,7% contestó algo en desacuerdo, en desacuerdo o muy en descuerdo.

Asimismo, 85,4% se manifestó algo en desacuerdo, en desacuerdo o muy en descuerdo con que continúen las protestas en todo el país. Sólo 11,3% está a favor de su continuidad.

Fuente: http://www.avn.info.ve/contenido/809-venezolanos-est%C3%A1-favor-conferencia-paz


Tomado de aquí



"Te quise" - Camila Moreno

sábado, 8 de marzo de 2014

Yo
que me esfuerzo ahora por admirarlos como si nada hubiese pasado
contemplo y reconozco al mismo tiempo
a un verdugo y a un salvador
a un fabulador y a un soñador

a quienes
con la misma pasión
ríen, lloran y aman;
como si nada hubiese pasado



"Poema de los dones" - Borges

"La verdad es la única realidad" - Paco Urondo

"Aquí te amo" - Pablo Neruda

Stronger than me - Amy Winehouse

jueves, 6 de marzo de 2014

Una lucha contra la hegemonía creciente del agronegocio - por François Houtart









Del 10 al 14 de febrero se reunieron en Brasilia 15.000 campesinos para celebrar 30 años de lucha. El lema era: Una Reforma agraria popular.

1.            El contexto
 
De hecho, la situación es intolerable: en 2010, 175 millones de ha improductivas (por especulación) y casi 4 millones de familias campesinas sin tierra; una constitución inaplicada y una ley agraria casi sin efecto; 2013 ha sido el peor año: 100 unidades repartidas y 5.000 familias reubicadas, cuando cerca de 100,000 esperan en campamentos del MST una asignación de tierras[1].
 
No se trata solamente de una lucha contra los latifundistas tradicionales, sino también contra las transnacionales del agronegocio (30 millones de ha compradas en los 20 últimos años) y el capital financiero. Desde los 90, el modelo se transformó en agro-exportador, basado sobre monocultivos. En los últimos 20 años, la producción de alimentos disminuyó de 20 a 35 %, cuando la caña de azúcar aumentaba de 122 % (para el etanol) y el precio de los alimentos subió; el Mato Groso, gran productor de soja transgénica, importa el 90 % de la alimentación de otros estados; 6 millones de personas fueron desplazadas (700,000 en el estado de São Paulo); se utiliza la mayor proporción mundial de tóxicos (5 kg por habitante); en 2013 se importaron 16 millones de toneladas de fertilizantes; en el mismo año se exportaron 18 millones de toneladas de maíz a los EEUU (para el etanol). Entre 2003 y 2010, las grandes propiedades pasaron de 95 a 127,000 y su superficie de 182 millones a 265 millones de ha.
 
No hubo en Brasil una reforma agraria “clásica”, promovida por la burguesía industrial (como en Corea del Sur, p.ej.) por el origen externo del capital. Se pasó directamente del latifundio al agronegocio exportador con superexplotación de los campesinos. Los efectos (externalidades) se traducen en la destrucción ambiental (especialmente la Amazonia), la supresión de empleos y la migración rural. Esta “modernización conservadora” se realiza bajo el liderazgo de un grupo de 450,000 empresas que poseen 300 millones de ha y controlan la producción de commodities, frente a 4,2 millones de obreros rurales, 4,8 millones de pequeños campesinos (produciendo 70 % de la alimentación) y 3,8 millones sin tierras. Cuando 15,000 campesinos cantan la Internacional en el gimnasio de Brasilia, esto significa que la lucha de clases no es un concepto obsoleto.
 
Las reformas de Lula permitieron a millones de pobres salir de la miseria. Pueden comer gracias a los subsidios del Estado. El Gobierno PT de Dilma, en coalición con partidos conservadores, sufre las presiones de los “ruralistas” con alto poder político y apoyo de los media. El agronegocio prevalece en la política agraria. En estas circunstancias ¿cómo definir una estrategia? Es el desafío del MST.
 
2.            Las estrategias
 
La estrategia del MST se adaptó en función del contexto socioeconómico del país y de su coyuntura política. Desde su fundación, en 1984, el movimiento se fijó como objetivo una nueva repartición de las tierras. La estrategia consistió en preparar grupos de campesinos sin tierra para ocupar propiedades vacías de grandes terratenientes. Se les reunía en asentamientos, viviendo bajo tiendas de plástico, organizados por grupos de 12 familias, administrando colectivamente servicios comunes, las escuelas primarias y los centros de salud. La solidaridad nacional e internacional los ayudaba. Esta situación podía durar meses. En el momento adecuado, tomaban posesión de las tierras, para organizar la producción agrícola en cooperativas y construir sus casas.
 
El origen cristiano de varios de los líderes influyó la orientación del movimiento, como lo recordó en el Congreso una religiosa francesa cercana del MST desde su inicio. La Comisión de la Pastoral de la Tierra de la Conferencia Episcopal acompañó sus luchas. Sin embargo, el MST siempre afirmó su autonomía. Con la introducción del capitalismo agrario, su análisis en términos de clases se profundizó y el aporte del pensamiento marxista fue importante en la formación de los líderes.
 
Durante la presidencia de Fernando Henrique Cardoso, el modelo neoliberal se profundizó. Cuando el MST recibió el premio Rey Balduino[2] en 2001, el gobierno acusó a Bélgica de financiar un movimiento terrorista. El príncipe Felipe (actual Rey), que tenía que presidir una misión económica en Brasil, fue declarado persona non grata. El MST apoyó la constitución del PT que, en 2002, permitió la elección de Lula. La lucha contra el hambre desembocó en políticas sociales de ayuda (menos de 5 % de la renta nacional), pero no en una transformación de las estructuras sociales del campo. Al contrario, el modelo agro-exportador se acentuó con el aumento del capital externo, el desarrollo de multinacionales brasileñas y la expansión del capital financiero (en 8 años, el pago de los intereses de la deuda interna a los bancos fue de 320,000 millones de USD aproximadamente). Lula realizó el “consenso brasileño” gracias a esta política.
 
Con Dilma (2010), el modelo agro-exportador se reforzó. Leyes laborales y ambientales más favorables a la “agricultura moderna” fueron votadas y la reforma agraria casi bloqueada. Se siguieron los pagos de la deuda externa. Durante tres años la Presidenta no recibió el MST, que en la víspera del Congreso, envió una carta con 10 propuestas. La presidenta acordó una audiencia, donde dos de las propuestas fueron aceptadas: una aceleración de programas existentes de establecimiento familiar sobre tierras recuperadas (para 36,000 de los 100,000 en espera) y de formación técnica. La decepción fue evidente. En un momento donde varios indicadores económicos manifiestan la fragilidad del modelo brasileño y, por ende, del consenso social, eso podría significar un peligro político para el gobierno.
 
3.            El futuro de las luchas
 
Para el MST, está claro que no se trata solamente trasformar la situación agraria. Frente a 24 millones de jóvenes sin empleo, a 14 millones de trabajadores analfabetos, a la degradación rápida de la naturaleza, es una lucha contra un modelo que ha llegado a sus límites. No basta cambiar las reglas. Es una lucha de clases, que no puede contentarse con eliminar la pobreza, sino la desigualdad; y que en el campo no se limita a una reforma agraria clásica, sino que incluye el fin de los monopolios de las semillas, la reconstrucción de la biodiversidad, la regulación del agua y la reforestación. Desde el exterior, el capital internacional domina el modelo agroexportador y la explotación minera; en el interior, la burguesía controla el banco central y el aparato judicial. Es por ante esto que se necesita una alianza entre todas las fuerzas para actuar contra la hegemonía del capital.
 
Al principio, el MST tenía bastante esperanza en la acción política del PT. Sin embargo, la decepción fue cada día más grande, y no solamente porque el partido ha tenido que gobernar en alianzas. El apoyo crítico se transformó en ataques frontales. El movimiento se encontraba en una situación ambigua: por una parte, no existía alternativas políticas inmediatas y por otra parte, la mayoría de sus miembros apoyaban a Lula y a Dilma, en función de los programas de lucha contra la pobreza. El MST decidió aprovechar todos los espacios de acción, fuera o dentro del gobierno, y afirmó su autonomía en el campo político.
 
Se preparó un programa detallado. En su núcleo, una agricultura ecológica y familiar, con la democratización de la tierra, nuevas matrices tecnológicas, soberanía de las semillas y relaciones con la industria. Luego, una racionalización del uso de los recursos naturales, del agua, de la energía, de las infraestructuras. Después, creación de condiciones dignas de trabajo y de vida y desarrollos educacionales y culturales a diferentes niveles. Finalmente, cambios de la estructura del estado y en particular de los organismos para la agricultura. Semejante programa no es socialista (se prevé, por ejemplo, una compensación financiera para las tierras expropiadas) porque, dice el MST, las condiciones de tal pasaje no existen todavía y se debe preparar con más tiempo.
 
Desde un punto de vista práctico, eso significa retomar las ocupaciones de tierras, como se hizo desde junio de 2013, a pesar de la preparación de una ley, calificando de terrorismo el cierre de carreteras y de calles.[3] Un segundo elemento es la presión sobre el Gobierno, para obtener medidas concretas y cambios institucionales. De ahí, la carta a la presidenta Dilma y sus 10 puntos concretizando el programa. La alianza con otras fuerzas de resistencia constituye el tercer aspecto de la estrategia, no solamente con los otros movimientos campesinos y con los sindicatos obreros, sino también con las nuevas protestas urbanas. Finalmente, la formación de los miembros y de los líderes es el último pilar de la estrategia del futuro.
 
- François Houtart es Profesor en el Instituto de Altos Estudios Nacionales de Quito (Ecuador).


[1] Las cifras del artículo provienen de: El Programa del MST, septiembre 2013.
[2] Premio bisanual para iniciativas de desarrollo en el Sur.
[3] En previsión a la copa del mundo.
 
 
Tomado de aquí
 
 
 
 
 
 
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