Es sobre el mar que te siento.
Es sobre el cielo estrellado que canto tu tiempo.
Es que no hay forma de amarte sin haberte amado dos veces.
Es que todo es voluntad de ti.
Piedra sobre piedra el semental,
piedra sobre piedra la tibieza,
ciento que golpea a la ciudad,
arte que marea los cimientos,
burla que de tanto caminar
dio final al fin y eterno comienzo.
Natural todo tu ser naturaleza,
espiral todo el príncipe cansado,
han de amar las estrellas que a tu lado
enderezan la espalda de la luna,
adineran con pan, avinagran con lluvia.
Si es que hoy es resumen de mañana,
arriesgo dos mil al cierre y trece al alce,
arriesgo los que en mi forma se alcen,
arriesgo por partes iguales al vindicador y al tunante.
Natural este son naturaleza,
empezar por la tierra que es la Tierra,
que no es mugre ni esencia sacudida,
que no es algo que le sobre a la baldosa,
que es la base de todo y la más religiosa.
Si es que el llanto tiene ganas de alumbrarme,
con un ruido mayor al de las aves,
se avecinan por mí los funerales,
que hay momentos al sol, momentos claves,
en donde sólo un señor da con la llave.
Como el viento que se confunde con un automóvil cuando uno está esperando al auto. Como un auto que se confunde con el viento cuando uno está esperando el amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario