Esos sonidos tiesos del olvido,
que retumban en la parte de ciudad /que me ha dolido/
me recuerdan a otros ruidos madre;
con la Jenny, tan linda y diligente,
que nos dejó sin pan ni animales.
Esos mismos retumbos, hoy los sufro.
Como ayer igual antes de nada
esa herramienta atroz como balanza
ese martillo dale traca que traca
ese constante golpe de la metralla
ese olor a ruido, /olor a pesadilla/
que vuelve una y de nuevo a la escotilla
se mete en silencio, como en cuclillas,
y en un despertar alado, el que lo auspicia,
le dice: “vete de mi”… “¡ruido a la vista!”
Se esfuma el traicionero acallando vocación,
se va por la rendija de vaya a saber qué amor,
se sabe que otro espacio pronto lo albergará,
nunca han faltado gentes para hacer despertar,
con ruido que herramienta, máquina o pedestal,
con ruido botarate, ruido preso de sonar,
ruido canción de espanto, ruido que has de callar,
ruido de todas las plumas que juntas se agitarán,
ruido más de la cuenta, /ruido, la pagarás/