Londres. La
ONG británica Oxfam denuncia en un informe presentado hoy que las 85
personas más ricas del mundo tienen una fortuna equivalente a todas las
posesiones de la mitad de la población más pobre del planeta, unas tres
mil 500 millones de personas.
Oxfam, que dio a conocer el informe Trabajar para unos pocos de
cara al Foro de Davos que comienza este miércoles, critica la evasión
de impuestos que hacen los más ricos a través de los paraísos fiscales,
así como la política estatal de ahorro que afecta sobre todo a las capas
sociales más bajas.
Las élites acomodadas han cooptado el poder político y
establecen las reglas del juego económico, socavando la democracia,
denuncia la organización internacional que busca soluciones para la
creciente brecha entre adinerados y pobres, y subraya que es un proceso
que ocurre tanto en los países desarrollados como en desarrollo.
Encuestas realizadas en seis países, Estados Unidos,
Reino Unido, España, Brasil, India y Sudáfrica muestran que la mayoría
de las personas opinan que las leyes se hacen para favorecer a los más
ricos.
“No podemos esperar ganar la batalla a la pobreza sin
combatir el problema de la desigualdad”, señaló la directora ejecutiva
de Oxfam, Winnie Byanyima.
El problema de los privilegios que tienen unos y las
desventajas de los otros amenaza con extenderse durante generaciones.
“Pronto viviremos en un mundo en el que la igualdad de oportunidades no
será más que un sueño”, destacó.
Un total de 210 personas se convirtieron en
multimillonarios durante 2013, para unirse a los mil 426
multimillonarios existente con un valor neto combinado de 5.4 billones
de dólares, dice la investigación.
Cifras citadas por la organización aseguran que el
uno por ciento más rico de la población en todo el mundo tiene 110
billones de dólares, lo que equivale a 65 veces la riqueza total de la
mitad inferior de la población del planeta.
Byanyima señaló que esta elite adinerada podría
acomodarse cómodamente en un autobús de dos pisos e instó a los líderes
mundiales a hacer frente a este problema acuciante y a los gobiernos a
utilizar los ingresos fiscales para proporcionar asistencia sanitaria
universal, educación y protección social a los ciudadanos.
Ante las evidentes leyes que favorecen a los más
pudientes, Oxfam denuncia que desde finales de 1970 las tasas de
impuestos para los más ricos se han reducido en 29 de los 30 países
sobre los cuales se dispone de datos.
Tomado de aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario