“Es un orgullo escuchar a Cristina denunciar la voracidad de los capitales financieros”

Sabbatella se refirió a la participación de la presidenta en la Cumbre del G20.


“Es un orgullo escuchar a nuestra presidenta que, con enorme coraje y lucidez y ante representantes de grandes capitales económicos del mundo, denuncia la ambición voraz del capitalismo financiero y el daño que produjo y sigue produciendo la liberalización de los mercados y la desregulación estatal”, sostuvo el diputado nacional Martín Sabbatella al destacar la participación de Cristina Fernández de Kirchner en el marco de la Cumbre del Grupo de los 20.

“Se trata de una mujer latinoamericana que hace tiempo se transformó en una dirigente fundamental de una región del mundo que está saliendo del mismo pozo en el que caen muchos países aparentemente desarrollados”. “Es indudable la responsabilidad de los capitales financieros especulativos en la crisis económica desatada en 2008. La responsabilidad de esos que se enriquecen sin producir ni un botón y que terminan afectando a millones de personas en los países en los que se les facilitaron los negocios”, afirmó el presidente del bloque Nuevo Encuentro y opinó: “Cuando Cristina les habla de que es necesario un capitalismo en serio les está diciendo que apuesten a la producción y a la generación de empleo y no a la especulación financiera”. “Casi siempre, esa especulación fue apañada o directamente promovida por organismos de financiamiento internacional, que impulsaron una y otra vez la desregulación estatal”, agregó Sabbatella.

“En muchos países de Latinoamérica, después de crisis sociales terribles generadas por inversiones especulativas y por pésimas recetas de consultoras internacionales, estamos consiguiendo revertir la matriz económica instalada durante el último cuarto del siglo XX, incluso mediante dictaduras sangrientas”, consideró el diputado nacional. “Hoy Argentina y Latinoamérica son un ejemplo ineludible para países del llamado primer mundo porque, descartando las recetas de los organismos de financiamiento internacional, se desendeudó, priorizó un crecimiento con recuperación del empleo y distribución de la riqueza y puso al Estado como motor y articulador de ese desarrollo”, concluyó Sabbatella.

Tomado de aquí.