El sábado 1º de junio se cumplieron 9 años de la ocupación
militar en Haití, desarrollada por la Minustah, conjunto de fuerzas
militares de la ONU que involucra a varios países de América Latina.
Desde el equipo de comunicación del ALBA de los movimientos sociales se
realizó una entrevista a la Brigada de solidaridad Jean Jaques
Dessalines, impulsada por el MST de Brasil y en la que participa también
el FPDS-Corriente Nacional de Argentina. Matías Duverni, integrante de
esta organización y trabajador de la salud, responde las preguntas.
¿Cómo se vivió en Haití la campaña por el 1 de junio por el retiro de la Minustah?
En Haití hubo muchas actividades, en diferentes partes del país: actos, movilizaciones, conferencias, espacios de discusión sobre las acciones de la Minustah en el país. Quizás la central fue la actividad que se realizo en Puerto Príncipe organizada por el Comité Internacional por la retirada de las tropas Militares de Haití, una actividad que duró dos días, contó con la presencia de intelectuales y referentes nacionales como es el caso del senador nacional Jean Charles Moises, quien estuvo por Brasil y Argentina el mes pasado realizando actividades para difundir esta conferencia y es uno de los legisladores que presentó el pedido de retiro de las tropas en el Senado Nacional. También contó con la presencia de referentes sindicales de Brasil, Argentina, EE.UU., Francia, El Salvador, entre otros. Las actividades fueron un panel de debate sobre la situación actual de la intervención militar, con un repaso histórico de las diferentes intervenciones militares que tuvo Haití, durante la mañana del primer día. Por la tarde tuvo lugar una movilización y un acto público donde participaron unas 3 mil personas. El segundo día continuaron los saludos de diferentes países en apoyo a la actividad y el apoyo por la retirada inmediata de las tropas de la Minustah.
¿Cuál es la situación que se vive en el país con la presencia de las tropas extranjeras? ¿Qué consecuencias tienen estas y otras medidas para la soberanía y autodeterminación del pueblo haitiano?
La situación que se vive es totalmente de opresión contra el pueblo haitiano. Hay un rechazo total del pueblo hacia las tropas, lo que dice el pueblo es que la única función que cumple la Minustah es cuidar el lugar del presidente y cuidar el trabajo de empresas trasnacionales, como las zonas francas, las maquilas, minerías. Otro trabajo es reprimir las movilizaciones populares y de contención social. La Minustah tiene muchísimas denuncias por corrupción, por casos de prostitución, de violencia, de robos a campesinos, la ultima epidemia de cólera que se produjo, con 8 mil muertos, se acusa a los soldados de Nepal de haber provocado la contaminación del agua.
Las consecuencias que trae con respecto a la soberanía del pueblo haitiano es la imposibilidad de manifestarse públicamente contra las corrupciones del gobierno, es priorizar la intervención militar, antes que el fortalecimiento de la educación y la salud (alrededor de 70% son privadas, donde las mayorías no tienen acceso). El presupuesto de la Minustah es casi igual al presupuesto anual del Estado haitiano, lo que se reclama es que es dinero se ponga a disposición del pueblo. Sería totalmente distinto si la ONU y los EE.UU. quisieran poner ese dinero para el desarrollo productivo, para el desarrollo de la agricultura campesina, para realizar la formación profesional y técnica del pueblo haitiano. Y si los Gobiernos que tienen presencia militar en la Minustah enviaran profesionales de educación, salud, ingenieros para el desarrollo haitiano. Ahí debería estar el compromiso.
¿Cómo se manifiesta la solidaridad práctica de los movimientos populares?
La solidaridad se manifiesta en el día a día en el terreno: los movimientos populares están haciendo grandes esfuerzos para realizar acciones en conjunto, realizar formación política y técnica en común, entre otras actividades. El desafío que se tiene por delante es de mayor nivel de articulación, tanto nacional como internacional, no quedarse “aislado”. Por eso es muy importante la presencia de una delegación de organizaciones haitianas a la Primera Asamblea del ALBA desarrollada hace poco en Sao Paulo, y la importancia de seguir fortaleciendo la Vía Campesina en Haití.
En ese sentido, ¿cuáles son los resultados más importantes de la Brigada Dessalines, con el apoyo de otros internacionalistas?
La Brigada Dessalines es un ejemplo claro de solidaridad internacional, que se lleva adelante con mucho esfuerzo. Algunos resultados: en el primer periodo de trabajo de la brigada se colocaron alrededor de 2 mil cisternas de recolección de agua de lluvia (solamente el 15% de la población tiene acceso al agua potable), se han hecho muchas actividades para el fortalecimiento y desarrollo agroecológico, como actividades de formación técnica, realización de casas de reproducción de semillas orgánicas, se ha hecho formación de producción de semillas (Haití no es soberano con respecto a la producción de semillas, siendo un país de gran producción de hortalizas), seminarios de formación política, se han hecho actividades de intercambio de conocimiento técnico y político (han viajado 80 haitianos a conocer experiencias de la Vía Campesina en Brasil), se ha hecho un trabajo fuerte de alfabetización (alrededor de 400 campesinos), sobre todo en la zona de Lartibonite. Otro ejemplo claro son las brigadas de médicos cubanos, ellos están en Haití desde 1998, y cumple un rol fundamental, casi estructural en la salud pública del pueblo haitiano. Estos son ejemplos, de la solidaridad que desde la Brigada Dessalines creemos que necesita el pueblo haitiano.
Fuente: Equipo de Comunicación del ALBA de los Movimientos Sociales (albamovimientos.org)
Tomado de aquí.
¿Cómo se vivió en Haití la campaña por el 1 de junio por el retiro de la Minustah?
En Haití hubo muchas actividades, en diferentes partes del país: actos, movilizaciones, conferencias, espacios de discusión sobre las acciones de la Minustah en el país. Quizás la central fue la actividad que se realizo en Puerto Príncipe organizada por el Comité Internacional por la retirada de las tropas Militares de Haití, una actividad que duró dos días, contó con la presencia de intelectuales y referentes nacionales como es el caso del senador nacional Jean Charles Moises, quien estuvo por Brasil y Argentina el mes pasado realizando actividades para difundir esta conferencia y es uno de los legisladores que presentó el pedido de retiro de las tropas en el Senado Nacional. También contó con la presencia de referentes sindicales de Brasil, Argentina, EE.UU., Francia, El Salvador, entre otros. Las actividades fueron un panel de debate sobre la situación actual de la intervención militar, con un repaso histórico de las diferentes intervenciones militares que tuvo Haití, durante la mañana del primer día. Por la tarde tuvo lugar una movilización y un acto público donde participaron unas 3 mil personas. El segundo día continuaron los saludos de diferentes países en apoyo a la actividad y el apoyo por la retirada inmediata de las tropas de la Minustah.
¿Cuál es la situación que se vive en el país con la presencia de las tropas extranjeras? ¿Qué consecuencias tienen estas y otras medidas para la soberanía y autodeterminación del pueblo haitiano?
La situación que se vive es totalmente de opresión contra el pueblo haitiano. Hay un rechazo total del pueblo hacia las tropas, lo que dice el pueblo es que la única función que cumple la Minustah es cuidar el lugar del presidente y cuidar el trabajo de empresas trasnacionales, como las zonas francas, las maquilas, minerías. Otro trabajo es reprimir las movilizaciones populares y de contención social. La Minustah tiene muchísimas denuncias por corrupción, por casos de prostitución, de violencia, de robos a campesinos, la ultima epidemia de cólera que se produjo, con 8 mil muertos, se acusa a los soldados de Nepal de haber provocado la contaminación del agua.
Las consecuencias que trae con respecto a la soberanía del pueblo haitiano es la imposibilidad de manifestarse públicamente contra las corrupciones del gobierno, es priorizar la intervención militar, antes que el fortalecimiento de la educación y la salud (alrededor de 70% son privadas, donde las mayorías no tienen acceso). El presupuesto de la Minustah es casi igual al presupuesto anual del Estado haitiano, lo que se reclama es que es dinero se ponga a disposición del pueblo. Sería totalmente distinto si la ONU y los EE.UU. quisieran poner ese dinero para el desarrollo productivo, para el desarrollo de la agricultura campesina, para realizar la formación profesional y técnica del pueblo haitiano. Y si los Gobiernos que tienen presencia militar en la Minustah enviaran profesionales de educación, salud, ingenieros para el desarrollo haitiano. Ahí debería estar el compromiso.
¿Cómo se manifiesta la solidaridad práctica de los movimientos populares?
La solidaridad se manifiesta en el día a día en el terreno: los movimientos populares están haciendo grandes esfuerzos para realizar acciones en conjunto, realizar formación política y técnica en común, entre otras actividades. El desafío que se tiene por delante es de mayor nivel de articulación, tanto nacional como internacional, no quedarse “aislado”. Por eso es muy importante la presencia de una delegación de organizaciones haitianas a la Primera Asamblea del ALBA desarrollada hace poco en Sao Paulo, y la importancia de seguir fortaleciendo la Vía Campesina en Haití.
En ese sentido, ¿cuáles son los resultados más importantes de la Brigada Dessalines, con el apoyo de otros internacionalistas?
La Brigada Dessalines es un ejemplo claro de solidaridad internacional, que se lleva adelante con mucho esfuerzo. Algunos resultados: en el primer periodo de trabajo de la brigada se colocaron alrededor de 2 mil cisternas de recolección de agua de lluvia (solamente el 15% de la población tiene acceso al agua potable), se han hecho muchas actividades para el fortalecimiento y desarrollo agroecológico, como actividades de formación técnica, realización de casas de reproducción de semillas orgánicas, se ha hecho formación de producción de semillas (Haití no es soberano con respecto a la producción de semillas, siendo un país de gran producción de hortalizas), seminarios de formación política, se han hecho actividades de intercambio de conocimiento técnico y político (han viajado 80 haitianos a conocer experiencias de la Vía Campesina en Brasil), se ha hecho un trabajo fuerte de alfabetización (alrededor de 400 campesinos), sobre todo en la zona de Lartibonite. Otro ejemplo claro son las brigadas de médicos cubanos, ellos están en Haití desde 1998, y cumple un rol fundamental, casi estructural en la salud pública del pueblo haitiano. Estos son ejemplos, de la solidaridad que desde la Brigada Dessalines creemos que necesita el pueblo haitiano.
Fuente: Equipo de Comunicación del ALBA de los Movimientos Sociales (albamovimientos.org)
Tomado de aquí.
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